La Agencia de Protección Medioambiental (EPA) se puso en contacto ayer con el consorcio alemán para comunicarle que ha llegado a la conclusión de que también introdujo un software para manipular las emisiones de los motores diésel en los propulsores 3.0 TDI de seis cilindros.

Apenas una hora después de que saltara la noticia y de que la EPA hiciera pública su nota, el grupo Volkswagen también hizo pública una nota en la que negaba que hubiera instalado cualquier tipo de modificación en estos motores 3.0 TDI de seis cilindros diésel modelos para manipular las emisiones.
Al mismo tiempo explicaba que se ponía a la entera disposición de la agencia medioambiental para clarificar por completo este asunto que calificó de malentendido.
La agencia medioambiental ya informó a Volkswagen el pasado día 22 de septiembre de que expandiría la investigación a estos motores de seis cilindros y tres litros de cubicaje que el consorcio alemán incluye en sus berlinas de gran tamaño y en los todocaminos.
Según la EPA los motores investigados serían los V6 incorporados a modelos de las marcas del grupo Volkswagen vendidos en EEUU desde 2014 a 2016 (año modelo según las marcas aunque no haya llegado el citado año).
Este motor se incorpora en varios modelos de Audi (Q5, A6, A7 y A8 y A8 Largo), en el Volkswagen Touareg y en el Porsche Cayenne.